viernes, 10 de junio de 2011

El periplo judicial por el monitor del ordenador, encarrilado

La pesadilla está cerca de concluir. El señor juez me ha citado para juicio verbal el día 20; es decir, bastante rápido. La cosa es que la empresa demandada no aparezca con una batería de abogados de alto standing, porque un servidor no lleva más que a su humilde persona -ay, si me oyera mi padre, monje franciscano de pro, tan atento siempre al pecado de soberbia- y la factura de la tienda de informática con una escueta nota sobre el posible origen de la avería. En fin, lo peor que puede pasar es que su señoría me niegue los 105 leuros que reclamo a la compañía eléctrica. No obstante, me fastidia. 105 leuros son dos noches de mambo apañadito, y una cifra ya de cierta entidad para un parado.

4 comentarios:

  1. Que tengas suerte; para un parado cualquier cantidad de dinero es representativa

    David

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  2. Di que si Felipe, di que si: al César lo que es del César.

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  3. Si todos hiciésemos como tú y denuciásemos más las injusticias, las empresas actuarían de otra manera y dejarían de tomarnos el pelo.
    Saludos

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  4. a por ellos! y un pequeño apunte: esa modestia te impide admitir que los 100 euritos te los puedes gastar sin problema en una noche...

    ;)

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